5º C Y D 2010 DE VISITA EN EL FERROCLUB




Las seños Sonia y Mariela visitaron el FERROCLUB junto con los chicos de 5º C y D y las seños Vanina y Marcela.
Los alumnos disfrutaron del paseo y aprendieron un montón gracias a Lola y a Coco, que fueron los guías.
Coco con 86 años recuerda hasta el mínimo detalle acerca del ferrocarril y su historia.
Fue una visita muy interesante en vísperas del Bicentenario, y creemos que el FERROCARRIL marcó un antes y un después en la historia de nuestro país, los pueblos y las comunicaciones.
Ojalá algún día podamos ser testigos de su auge nuevamente y sería bueno que todos los habitantes de la República Argentina y el gobierno, se den cuenta de su importancia.

CREAMOS DISEÑOS EXCLUSIVOS DE ABANICOS...

De la lectura de "CURUMBAMBA Y CURUMBÉ" de Silvia Grau, nos surgió una duda y decidimos investigar y poner manos a la obra en la creación de los más lindos abanicos, un objeto muy de moda entre las damas de 1810...




El abanico, un elemento hoy bastante fuera de época, fue usado por las civilizaciones antiguas. En Egipto eran grandes, realizados con plumas, y movidos por esclavos, para dar aire al faraón y a la vez espantar moscas y otros insectos. También se hallaron abanicos en restos arqueológicos de los Etruscos, en el 500 antes de Cristo.
En China también era ampliamente usado, pero como pequeño objeto personal. No sólo servía para refrescarse sino que también era un elemento decorativo y elegante, y en su realización se utilizaban diversos materiales: sedas, papel, plumas, bambú, encajes, marfil, maderas livianas, etc. Se pintaban decorativamente pues se usaban como ornamento personal, y hasta como sinónimo de complicidad amorosa.
Recién en el siglo VII después de Cristo se inventa el abanico plegable, en Japón, en que este objeto fue muy usado y llegó a considerarse un elemento ritual.
Se difundió posteriormente en Europa, y se comercializó y arraigó más su uso en España, y de allí pasó a América. Es un elemento usado por las mujeres, aunque en algunas culturas también lo usan algunos hombres. En los siglos XVIII y XIX fue muy utilizado y la literatura y el arte lo reflejaron en las producciones.
Existen en la actualidad diversas fábricas que se dedican a la producción de abanicos, tanto para uso personal como para recuerdos y souvenires: de maderas, plásticos y otros materiales, pintados a mano o litografiados. Y también hay ofertas en los negocios de antigüedades de verdaderas obras de arte logradas en este objeto cotidiano de auge romántico.
En las reproducciones y textos costumbristas de la España del siglo pasado y aún de este, especialmente en la zona de Sevilla y Granada, podemos hallar referencias al abanico, y hasta un significado propio de cada acción que se hacía con él.
Por ejemplo, entre otros muchos movimientos que tenían sus significados, se pueden citar:

Si la mujer escondía los ojos detrás del abanico, estaba diciendo a su interlocutor que lo quería.
Si colocaba el abanico sobre la mejilla izquierda, la respuesta era: NO; y si lo posaba sobre la derecha, la respuesta era: SÍ.
Si la mujer se abanicaba con rapidez, significaba que estaba comprometida; y si lo hacía lentamente, le transmitía que estaba casada.
Si estaban nerviosas, sus movimientos eran cortos y rápidos; si estaban tranquilas, eran mpvimientos suaves y acompasados.
Si cerraban su abanico bruscamente, eran porque estaban enojadas.
Aunque el uso actual no sea muy frecuente, es común que en cada casa, especialmente de descendientes españoles, haya un abanico.
Es importante tener en cuenta que el primer ventilador, a corriente alternada, con pequeño motor asincrónico, aparece en 1891, por lo que hasta esa época, es de gran utilidad, siendo reemplazado paulatinamente por este nuevo adelanto.